El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, pidió este domingo un alto el fuego "inmediato" en la Franja de Gaza, que el ejército israelí sigue bombardeando tras siete meses de guerra que dejan ya, según Hamás, más de 35.000 muertos.
Equipos de la AFP y testigos reportaron nuevos bombardeos israelíes en varios puntos de Gaza, incluyendo en Rafah, en el extremo sur del territorio palestino, donde las tropas israelíes preparan una gran ofensiva terrestre.
Un hospital indicó que recibió 18 cuerpos en las últimas 24 horas. Además dos médicos, padre e hijo, murieron en bombardeos israelíes en Deir al Balah, en el centro del enclave palestino, según los servicios de seguridad civil de Hamás.
"Reitero mi llamamiento, el llamamiento de todo el mundo a un alto el fuego humanitario inmediato, a la liberación incondicional de todos los rehenes y a un aumento inmediato de la ayuda humanitaria", declaró Antonio Guterres en un discurso en video ante una conferencia internacional de donantes en Kuwait.
"Pero un alto el fuego solo será el comienzo. Será un largo camino para recuperarse de la devastación y el trauma de esta guerra", añadió.
La ONU advirtió que la ayuda humanitaria está bloqueada desde que las tropas israelíes entraron el lunes en el este de Rafah y tomaron el paso fronterizo con Egipto, sellando una entrada vital a este territorio amenazado de hambruna.
Según el portavoz de la autoridad de los puestos fronterizos de Gaza, Hicham Adwan, "vehículos militares israelíes avanzaron desde la frontera (...) y se adentraron unos 2,5 kilómetros".
Israel insiste en la necesidad de lanzar una operación en Rafah, donde se concentran 1,4 millones de personas, en su mayoría desplazados internos por la guerra, al considerar que allí están situados los últimos batallones de Hamás.
El ejército israelí indicó que unos 300.000 palestinos ya salieron desde el lunes de los barrios del este, tras ordenar su evacuación.
Israel añadió que estos lugares fueron "escenario de actividades terroristas de Hamás".
El jefe de Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, estimó que una ofensiva israelí a gran escala en Rafah contravendría el "derecho internacional humanitario".
Por su parte, Estados Unidos, principal aliado del Estado hebreo, advirtió esta semana a Israel que dejará de suministrarle algunas armas, si lanza una ofensiva a gran escala en Rafah.
Las fuerzas israelíes también emitieron órdenes de evacuación para Jabaliya y Beit Lahia, en el norte de la Franja de Gaza, donde afirma que Hamás "intenta reconstruirse", e informaron de una "operación importante en el distrito Zeitun de la ciudad de Gaza.
La guerra estalló el 7 de octubre de 2023 con una incursión de milicianos islamistas de Hamás que mataron a 1.170 personas, según un recuento de la AFP en base a datos oficiales israelíes.
Tras un canje de rehenes por presos palestinos durante una tregua de una semana en noviembre, las autoridades israelíes calculan que 128 siguen en Gaza, aunque 36 habrían muerto.
La ofensiva de represalia de Israel ha dejado hasta ahora 35.034 muertos en Gaza, según el Ministerio de Salud de Hamás, que gobierna este enclave desde 2007.
Los esfuerzos de mediación para un acuerdo de tregua parecen estancados después de que las conversaciones indirectas en El Cairo esta semana terminaran sin resultados concretos.
"Habría un alto el fuego mañana si Hamás liberara a los rehenes", declaró el sábado el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.